Entre los insectos del bosque más famosos se encuentran las luciérnagas, que producen increíbles destellos de luz desde su abdomen, donde se sitúan los órganos lumínicos.
De estos individuos se registran 2.000 especies, son familia de los lampíridos, pertenecen al orden de los coleópteros (escarabajos) y se pueden encontrar en distintos follajes húmedos donde sobreviven con una alimentación carnívora mientras crecen, e ingiriendo néctar y polen cuando son adultas.
Luciérnaga. Edición de Atlas Animal. Original por Francisco Corado en Pixabay.
Datos de la LuciérnagaClasificación: Invertebrado / Insectos Reproducción: Ovíparo Alimentación: Carnívoro Hábitat: Aéreo Orden: Coleoptera Familia: Lampyridae Género: Lampyris Longevidad: 21 días Tamaño: 0,5 – 2,5 cm
Estado de conservación
Distribución de la Luciérnaga
Características de las luciérnagas
Al hablar de luciérnagas lo primero que se nos viene a la mente es la luz que emiten, que se genera a través de los órganos lumínicos tras recibir oxígeno.
La luminosidad aparece una vez que el oxígeno llega a esos órganos, ocurriendo una combinación que se da entre las células de estos animales del bosque, junto a una sustancia denominada “luciferina”.
Lo curioso del tema es que los pequeños “bichos” como también son conocidos, no necesitan producir grandes cantidades de calor para irradiar, de hecho no se guían por esto, sino por lo mencionado anteriormente.
Datos sobre su estructura morfológica
El cuerpo de estos pequeños insectos del bosque está cubierto por un exoesqueleto muy endurecido en forma de concha, que tienen todos los escarabajos.
Asimismo, su estructura está constituida por la cabeza, tórax y abdomen. El tamaño de estos animales es de unos diez a catorce milímetros.
En cuanto a los machos poseen dos pares de alas, sin embargo, solo usan las segundas para volar; mientras que las hembras no se elevan ya que sus apéndices son más pequeños. Por otra parte, las luciérnagas del bosque tienen ojos y largas antenas. Son de colores marrón y negro habitualmente.
Hábitat de las luciérnagas
Los bichos de luz se encuentran distribuidos en el contienen americano y asiático, específicamente en los bosques templados donde la humedad predomina gracias a su gran pluviosidad.
De igual manera, estos insectos se hallan en bosques tropicales, ya que también les gustan los sitios cálidos con humedad donde se desenvuelven muy bien.
Alimentación
Las luciérnagas en estado larvario se alimentan de babosas, gusanos y caracoles pequeños, es decir, que durante esta etapa son animales carnívoros.
Atrapan a sus presas inyectándoles una especie de veneno llamado “fluido paralizante”, el cual los detiene, acabando con ellos de forma inmediata.
Sin embargo, cuando pasan la metamorfosis y se transforman en adultos desechan estos comestibles, por lo que incluyen en su nueva dieta: polen o néctar.
Los especialistas afirman que existen adultos que no se alimentan, debido a que almacenaron los nutrientes necesarios mientras fueron larvas.
Comportamiento ante posibles depredadores
Los bichos de luz no son apetitosos, motivo por el cual los depredadores casi nunca se atreven a consumirlos. Aunque cuando alguno decide hacerlo, estos insectos activan su luz para alejarlos y dejar en claro que saben muy mal.
Reproducción de las luciérnagas
Al llegar verano inicia la temporada de reproducción de las luciérnagas, quienes realizan un espectáculo natural mediante el parpadeo de luces, el cual es observado con asombro en algunas partes del mundo.
Durante ese momento generan distintos brillos como forma de comunicación para hallar parejas, en señal de apareamiento. Estas señales ópticas les resultan útiles durante el proceso de selección sexual, porque mediante los destellos son capaces de identificar a su sexo opuesto y seleccionar con quienes desean aparearse.
Eclosión de los huevos: nacimiento sobre el suelo
Las hembras de las luciérnagas colocan sus huevos encima del suelo húmedo de los bosques, donde se formarán las pequeñas larvas hasta salir de allí.
Las madres sueltan alrededor de 500 huevos, según calculan los expertos, quienes a su vez explican que éstos presentan algo de luminiscencia. Luego de transcurrir cuatro semanas nacen las larvas y se refugian en troncos de árboles o permanecen en túneles subterráneos.
Durante dos años aproximadamente continuarán como larvas, para después pasar por el acostumbrado proceso de metamorfosis hasta ser adultos. No tienen un ciclo de vida largo, como mencionamos anteriormente, estos animales del bosque viven de dos a cuatro meses.
Científicos siguen investigando sobre las luciérnagas para nuevos hallazgos
Actualmente los científicos realizan diversas investigaciones sobre las luciérnagas, haciendo hincapié en la sustancia “luciferina” que poseen, esto con el objetivo de descubrir nuevos hallazgos para el área de la genética.
Hasta ahora se desconoce cómo estos insectos controlan la intermitencia de su luz, siendo otro tema que se encuentra en debate. En este sentido, debemos conservar el hábitat de estos insectos para seguir garantizando su reproducción en zonas boscosas, ya que ha reducido en los últimos años a causa de la deforestación y el lanzamiento de sustancias químicas en acuíferos.
Sin duda, son especies curiosas muy apreciadas en el mundo, las cuales merecen seguir siendo analizadas a fin de que conozcamos más sobre ellas.