Los ácaros (científicamente acari o acarina) son animales invertebrados del orden de los artrópodos.
Estos animales son conocidos en todo el mundo por ser causa de problemas de salud que afectan al sistema respiratorio.
Ácaros. Edición de Atlas Animal. Original por WikiImages. Pixabay.
Datos de los Ácaros
Clasificación: | Invertebrado / Artrópodo |
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Reproducción: | Ovíparo |
Alimentación: | Omnívoro |
Hábitat: | Terrestre |
Orden: | Acariformes |
Familia: | Pyroglyphidae |
Género: | Arachnida |
Longevidad: | 10 – 19 días |
Tamaño: | 0,28 – 0,40 mm |
Peso: | 100 μg (microgramos) |
Estado de conservación
Distribución de los Ácaros
Características de los ácaros
Los ácaros son artrópodos arácnidos de los que existen unas 50.000 especies descritas y miles más de las que aún no se sabe mucho.
La especie más popular es el ácaro del polvo y es frecuente que habiten de forma natural en las viviendas rurales y urbanas.
Son animales diminutos que alcanzan tan solo unos cuantos milímetros.
Por ejemplo, los ácaros del polvo, que son los más conocidos, solo miden un máximo de 0,5 mm. Pero dependiendo de la especie la longitud varía y puede alcanzar los 10 mm.
De acuerdo a la etapa de vida en la que se encuentren, la forma del cuerpo de los ácaros varía, por ejemplo, cuando son larvas tienen tres pares de patas y al pasar a ser ninfas ganan un par más.
Cuando están desarrollados completamente como ácaros conservan las 8 patas y adoptan coloraciones diversas dependiendo de la especie y el ejemplar.
Sus efectos en el ser humano
En líneas generales los ácaros son inofensivo y no atacan al hombre, no obstante, son una de las causas más comunes de rinitis alérgica y asma.
En realidad, son sus heces las que causan estas enfermedades respiratorias, pues contienen una proteína que las induce.
Hábitat y localización territorial
Esta clase de animales invertebrados están presentes en todo el mundo, en cualquier ambiente y en cualquier condición climática. Los hay terrestres, acuáticos y aéreos.
Pueden vivir a grandes altitudes, en lo más profundo del mar y a temperaturas extremas (muy bajas o altas). Prácticamente han colonizado el mundo entero.
Sin embargo, son más frecuentes en sitios donde abunda la vegetación o la materia en descomposición.
Los ácaros del polvo tienen su hábitat perfecto en las zonas domesticas, y están presentes en casi todas las viviendas.
En ellas se alojan en colchones, almohadas, alfombras, peluches, cortinas e incluso en la ropa que se usa para dormir.
Las condiciones ideales para que los ácaros sobrevivan en los hogares son una temperatura entre 25º y 35º C y más de 50% de humedad. Si estas condiciones se dan, en bastante probable que existan ácaros.
¿Qué consumen los ácaros?
De acuerdo a cada especie, los ácaros tienen hábitos alimenticios distintos, por eso existen carnívorsos, fitófagos y detritívoros, por mencionar solo algunos.
El ácaro del polvo consume fragmentos de piel que el ser humano y los animales domésticos desprendes de forma natural.
No obstante, no muerden o atacan sino que recogen lo que estos desechan.
Comúnmente estos residuos se quedan en el colchón, la cama y los muebles, por eso los ácaros se asientan ahí para tener de qué alimentarse.
Reproducción de los ácaros y su ciclo de vida
Los ácaros se reproducen a temperaturas que van desde los 5 hasta los 30°C, pero especialmente si está a los 25°C pues es la temperatura perfecta no solo para el apareamiento sino para el crecimiento.
Cuando el macho fecunda a la hembra, transcurre un período de preovoposición para que esta ponga los huevos, es decir, no lo hace inmediatamente, sino unos 3 o 4 días después.
Los huevos pasan por varias etapas de desarrollo para completar su ciclo de vida.
En la primera fase tenemos un huevo redondo y achatado del cual sale una larva también redondeada, de color salmón y con tres pares de patas.
Tras cumplir este período, se convierte en ninfa de cuatro patas y pasa por los estados intermedios entre larvas y adultos. Hasta llegar a esa ultima fase.
Este proceso de crecimiento dura unos 25 días y en total la vida de un ácaro hembra va de dos a tres meses, mientras que el macho vive solo unas dos semanas.