Muchos son los animales que viven en el fondo del océano, y es que este entorno tiene todo lo necesario para que las diferentes especies que allí lo habitan puedan vivir y alimentarse como es debido.
Una de estas especies es el coral, un animal que en ocasiones, no suele ser catalogado como tal por sus características, pero que realmente si es una especie marina.
Coral. Edición de Atlas Animal. Original por joebelanger. Envato.
Datos del Coral
Clasificación: | Invertebrado / Equinodermos |
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Reproducción: | Ovíparo |
Alimentación: | Omnívoro |
Hábitat: | Acuático |
Orden: | Scleractinia |
Familia: | Fungiidae |
Género: | Acropora |
Longevidad: | Hasta 4,000 años |
Tamaño: | 25 – 100 cm |
Estado de conservación
Distribución del Coral
El Coral: Características de este animal marino
Aunque muchas veces se suele confundir a los corales con rocas o plantas, en realidad estas especies son animales que habitan en el fondo marino. Y es que no se podrían comparar con ellas, ya que los corales están vivos y no producen su propio alimento, simplemente utilizan sus pequeños brazos en forma de tentáculos para capturar su comida.
Se tratan de animales marinos bastante simples, ya que carecen de columna vertebral, extremidades, narices, oídos e incluso ojos. Además, no tienen la capacidad para desplazarse de un área a otra como lo hacen otros animales; es por ello que son considerados como sésiles.
En cuanto al tamaño de estos animales, éste varía dependiendo de la especie. Los corales más pequeños pueden alcanzar entre 1 a 3 milímetros de diámetro, mientras que los más grandes hasta 10 o 25 centímetros; cabe resaltar que cuando se unen en colonias pueden formar estructuras de hasta 4 metros de altura.
La vida promedio de estos animales dependerá de la especie; sin embargo, la mayoría oscila entre los 3 meses a los 30 años.
Hábitat: ¿En dónde suelen vivir los corales?
Los corales son animales que habitan en el mar, y es que se estima que hay más de 70.000 especies distribuidas por todos los océanos del mundo. Por lo general, la mayoría de ellos pueden ser encontrados en los océanos del hemisferio sur, en donde hay mares tropicales, cálidos y poco profundos.
Sin embargo, hay otros que prefieren las zonas polares, en donde puedan disfrutar de las profundidades frías y oscuras del océano.
Alimentación: ¿Qué acostumbran a comer?
Estos animales equinodermos se alimentan de una gran variedad de sustancias o materias que encuentran en el fondo del mar, como es el caso del plancton, materias organizas, e incluso pequeños peces; ya que éstos les proporcionan la energía que necesitan.
Además, es importante resaltar que las algas juegan un papel fundamental en la dieta de los corales, puesto que las mismas producen carbohidratos que ellos necesitan y utilizan como alimento.
A diferencia de otros animales, los corales cazan a sus presas utilizando sus tentáculos para inmovilizarlos o matarlos; ya que liberan una especie de veneno que toma acción cuando mantienen contacto con otros organismos. Una vez que logra capturar a su presa, la mueve hacia su boca con la ayuda de sus tentáculos.
Cuando digiere su alimento, éste animal tiende a expulsar los desechos por la boca y, así sucesivamente, comienza de nuevo el ciclo de su alimentación.
Reproducción y ciclo de vida
Los corales se reproducen asexualmente por brotación o fragmentación y, por lo general, son hermafroditas; esto quiere decir que producen tanto células reproductoras masculinas como femeninas.
Las larvas se fertilizan dentro del cuerpo de un pólipo o en el agua, por medio de un proceso conocido como desove; ellos tienden a liberar grandes cantidades de óvulos y espermatozoides en el agua para distribuir a sus crías en un área geográfica amplia.
Este evento masivo de desove, suele ocurrir anualmente y en una fecha específica; incluso los científicos pueden predecir cuándo sucederá eso.
Una vez que las larvas se encuentren en el agua, subirán hacia la superficie del océano para aprovechar la luz; después de flotar por la superficie, nadan hacia el fondo, en donde las condiciones son favorables.
Luego, se adhieren a una superficie dura, para posteriormente transformarse en un pólipo y crecer; esto lo hacen dividiéndose por la mitad. A medida que se van acumulando más pólipos, se desarrolla una colonia y, finalmente se lleva a cabo el proceso de reproducción.
Cabe resaltar que, en la mayoría de los casos, las larvas se depositan en dos días, aunque en algunas ocasiones puede suceder que tengan que nadar hasta tres semanas, e incluso dos meses; aunque esto último no suele ser muy común.
Principales depredadores del coral
Actualmente, el ecosistema marino se encuentra muy amenazado, y esto se debe principalmente a la contaminación y a los depredadores que allí tienen lugar; entre ellos podemos mencionar a las estrellas de mar, los caracoles y las babosas marinas, entre otros.
Sin embargo, más allá de todos los depredadores que puedan haber, una de las principales amenazas es el hombre, ya que estos son los que causan la contaminación de las aguas y realizan prácticas pesqueras insostenibles; lo que ha causado el blanqueamiento de los corales e incluso la muerte de los mismos.